EDITORIAL
The Washington Post
Marzo 25 2020
O MUERE EL
CAPITALISMO SALVAJE, O MUERE LA CIVILIZACION HUMANA
Traducido al español
por Desmond Brown
Empezare aclarando que no soy
comunista; los reaccionarios, ultraconservadores les tienen mucho terror a
estos títulos; y casi siempre ante la falta de argumentos sólidos, terminan
repitiendo y adjudicándonos calificativos que solo han escuchado, pero que, en
la mayoría de los casos, desconocen su significado. Soy un Demócrata con ideas
Republicanas.
Todo el mundo habla del libro “La
riqueza de las naciones” de Adam Smith, el escoses que logro articular con sus
ideas, los pilares de la Economía Moderna que le dio paso al Capitalismo
Moderno; sin embargo, muy pocos hablan sobre el otro libro del mismo autor,
“Teoría de los sentimientos morales”; que hace una crítica muy puntual a la
conducta de la avaricia humana. Conociendo
ya la historia desde la Secundaria, vemos que el prólogo de la misma, tuvo su
origen cuando el feudalismo fue sustituido por este nuevo modelo económico.
La configuración Social, de la
“Teoría de los sentimientos morales”; y “la armonía del mercado” de las
riquezas de las naciones; es en sí una dicotomía que se concatena con la
sociedad; esto sin olvidar la famosa “mano invisible” que mueve ese mercado.
El 20 de enero del año 2009,
Barack Obama es juramentado Presidente número 44 de Estados Unidos; recuerdo
muy bien su discurso.
Obama recibía un país en
bancarrota, epicentro de una gran recesión mundial; he aquí un pequeño
fragmento de su gran discurso: “Pero esta crisis nos ha recordado que, sin un
ojo atento, el mercado puede salirse de control; y que un país no puede
prosperar durante mucho tiempo cuando solo favorece a los que ya son
prósperos”. Más que un discurso, fue una gran reflexión; el mercado había
quedado a las sanchas de los hombres que no tienen sentimientos morales, ni
empatía por la Humanidad; el mundo entero fue estremecido por el flagelo de la
avaricia humana; y la economía mundial cayó de rodillas ante una dura recesión.
La obsesión del oro negro, llevo a George W. Bush invadir y a atacar medio
oriente, la zona donde se encuentran las mayores reservas de petróleo; el mundo
jamás olvida la causa barata por la que justificaron la invasión a Irak;
aseguraban que Sadam Hussein tenía armas de destrucción masiva; la ONU, de
forma deliberada avalo la invasión. Sin embargo, en el 2010, Julian Assange,
fundador de Wiki Leaks, revelo la verdad de lo sucedido; y dejo al desnudo la
colosal mentira tarifada que los medios de comunicación le habían contado y
hecho creer al mundo; en los archivos que se filtraron, registraba la muerte de
más de 100 mil personas, de los cuales el 70% eran civiles. Jamás olvidare las
palabras de Assange: “La primera víctima de la guerra es la verdad”. Ese 22 de
octubre de 2010, se caía ante el mundo la muralla de la mentira tarifada.
En los últimos doscientos años,
nos hemos consumido la energía fósil concentrada de nuestro planeta desde sus
orígenes. La danza del capitalismo salvaje va dejando por su paso, la
destrucción acelerada de los recursos naturales del planeta; la explotación
inhumana del hombre; y la manipulación de la mente humana para que este de
forma sistemática se convirtiera en un rehén de las sociedades de consumo, que
sin darse cuenta se convierta en el arma de su propia autodestrucción.
La nueva pandemia ha quitado el
velo ilusionista, y el maquillaje hipócrita de la Civilización; la Italia de
Rómulo y Remo, de los Cesares, de Marco Polo, de Leonardo Da Vinci, de Galileo
Galilei, de Luciano Pavarotti, de Benito Mussolini, de Silvio Berlusconi, de
Andrea Bocceli, de Roberto Baggio, de Paolo Maldini, de Gennaro Gattuso; la
Italia que pago el fichaje más caro de su historia por el portugués Cristiano Ronaldo, 122 millones de euros; si
esa misma Italia que tuvo que desconectar la respiración artificial de sus
ancianos, para luego verlos morir; y que no pudo responder de la misma forma
como cuando organizaron el mundial de Italia 90; porque su sistema de salud
expiro en los brazos del capital privado, haciendo de salud una mercancía; lo
mismo está sucediendo con España, un país que presume de una monarquía; que se
ha convertido en un adorno costoso para un país que no tiene camas para atender
a sus pacientes.
La pandemia ya llego a la gran
nación del Norte; pero en los 100 primeros días de Gobierno, el Presidente
número 45 de Estados Unidos, Donald J. Trump, destruyo el sistema de salud que
había dejado su antecesor. Las consecuencias ya se están sintiendo; los
arrebatos de un líder que anda por el vecindario de la aldea global, ufanándose
de su “hegemonía o supremacía”; así como se llama el libro de Noam Chomsky,
están llevando a la gran nación del Norte, como lo expreso hace unos días el
Premio Nobel de Economía, Paul Krugman: “A que su Democracia y Economía estén
amenazadas por un segundo periodo presidencial de Trump en la Casa Blanca”. La
crisis del coronavirus ha puesto en aprietos a Trump, ya que el haber
minimizado esta pandemia le está pasando una factura en la encomia, porque la
bolsa de valores se ha desplomado en estas dos últimas semanas; y existe un
alto riesgo que la factura se extienda al mes de noviembre, en las elecciones.
La pandemia quito el antifaz del
modelo económico de las naciones más poderosas del Planeta (Estados Unidos y
China); y en el caso de Italia y España; ambos países miembros de la OTAN, que
maneja un presupuesto de casi 2mil millones de dólares, se vieron como los más
pobres del barrio, que fingían ser ricos, pero no tenían ni donde caer muertos.
La realidad ha quitado el efecto de la anestesia del capitalismo salvaje; y ha
tirado sus cartas sobre la mesa. Ha llegado la hora de replantear y de
humanizar este modelo económico; y hacernos el siguiente planteamiento: ¡O
muere el Capitalismo Salvaje, o muere la Civilización Humana! Como decía Albert
Einstein: “Locura es hacer lo mismo una y otra vez, esperando obtener
resultados diferentes”. No podemos
seguir viviendo en un planeta donde más del 80% de la riqueza, está concentrada
en un 1% de la población. Me resisto a defender con mi silencio un indefendible
y despiadado statu quo que concentra la riqueza de nuestros recursos naturales,
y medios de producción en pocas manos, capaces de derramar sangre inocente por
mantener intacto ese statu quo. Yo no puedo defender este statu quo que
privatiza el agua, la salud, la educación, el viento, el sol; Derechos Humanos
Universales que se han convertido en mercancías, que se encuentran solo al
alcance de una minoría rapaz, voraz e insaciable; mientras las grandes mayorías
invisibles; solo son visibles en los procesos electorales, disfrazados de
Democracia. Una gran realidad de todo lo que pasa a nivel mundial que nos
quieren tener controlados a losas vulnerables del planeta tierra porque la
avaricia y la ambición y ansias de poder los tiene enfermos.
ACTIVIDAD
Realizar un comentario crítico de
mínimo 10 líneas sobre una de las siguientes noticias e incluya elementos del
artículo “The Washington Post”, exprese algunas ideas sobre
·
¿Además del coronavirus que agudizó la crisis en
estos sectores?
·
¿Qué medidas considera que debería tomar el
gobierno?
·
¿Qué puede hacer como ciudadano para apoyar salir
de la en la crisis?
2. https://www.semana.com/nacion/articulo/colombia-rural-sin-hospitales-para-atender-la-crisis/659730